Rusia ha anunciado recientemente importantes cambios en su doctrina atómica. El nuevo texto amplía los supuestos que permitirían el uso de armas nucleares para responder a una agresión militar. A partir de ahora, Moscú podría responder con armamento atómico a un ataque contra su territorio cometido por un país que no disponga de ojivas nucleares, pero que tenga el apoyo de una potencia nuclear. Con ello, Rusia busca lanzar un claro mensaje, en primer lugar, a Ucrania. Pero también a su aliados, para que no autoricen a Kiev el uso de armas de largo alcance occidentales para lanzar ataques en profundidad contra territorio ruso. ¿Supone la nueva doctrina nuclear rusa un mayor riesgo de confrontación atómica? ¿Está subestimando Occidente las advertencias de Moscú? #DWAnaliza