En esta conferencia hablo muy brevemente sobre qué es la baja visión, qué patologías la producen y las posibles ayudas ópticas a las que una persona con baja visión puede optar.

Cuando una persona tiene baja visión y su oftalmólogo no puede hacer nada ni quirúrgica ni farmacológicamente, tiene que acudir a un especialista de Baja Visión, donde intentarán aprovechar su resto visual útil mediante diferentes ayudas. Las ayudas de baja visión se dividen en ayudas ópticas, ayudas electrónicas, ayudas biónicas y ayudas no ópticas. Simpre deben ir acompañadas de rehabilitación visual.

Para llevar a cabo el tratamiento de la persona que tiene baja visión hay que tener claro cuatro pilares básicos:
1) La psicología y mentalización del paciente
2) El rendimiento visual del paciente
3) La prescripción de las ayudas, según el pronóstico
4) El entrenamiento y la rehabilitación.

Conviene conocer las necesidades y requerimientos del paciente para no forzar
la prescripción de una ayuda no deseada. Lo más importante es tener uno o varios OBJETIVOS claros.