Esta obra consiste en una colección de cinco piezas para piano. La estética y el lenguaje que adopto son los propios del romanticismo musical: así es como he decidido relacionarme con la tradición precedente en esta ocasión. Es más, añado que Brahms ha sido mi mayor referente, no solo en el proceso de composición de estas piezas, sino también en mi forma de entender la música hasta ahora. Sin embargo, hay casos en los que es obvio que he querido separarme de dicha tradición para lograr otros objetivos artísticos. Con todo, siento que he dado igual importancia tanto a los elementos estrictamente musicales como a los extra-musicales, que tienen más que ver con cuestiones relativas a ciertos programas que he intentado seguir. A continuación, comentaré algunos rasgos relevantes de las piezas:

Romanza (I) -

Es la pieza más antigua y la que dio comienzo a este proyecto, el cual ha acabado siendo algo muy distinto a lo que iba a ser en un principio. En cualquier caso, el juicio y los comentarios de mi profesor Ramón fueron importantes para terminarla, y por eso se la dedico. De hecho, fue él quien me animó a componer una colección de piezas al más puro estilo romántico, y heme aquí. En cierto sentido, me siento bastante identificado con la historia que "cuenta" esta romanza.

Fantasías (II y III) -

Estas dos fantasía, que responden cada una a un programa, estaban previstas dentro de lo que iba a ser este proyecto en un primer momento. Ambas son un canto a una relación amorosa entre un chico (la primera) y una chica (la segunda), de ahí que haya motivos que aparecen en las dos. En efecto, se trata de la misma historia de amor contada desde dos puntos de vista: el primero es el del chico, que huye de un pasado turbulento lleno de fantasmas (representados por el motivo que abre la primera fantasía) que le perseguirán por mucho tiempo hasta que logra encontrar a su otra mitad. Así, al chico lo representa una escala descendente de seis notas y a la chica, la inversión de dicha escala. Con todo, se trata de una historia de superación en la que el protagonista consigue vencer a sus fantasmas y sublimar sus miedos de manera triunfal. Por otra parte, en cuanto al punto de vista de la chica retratado en la segunda fantasía, existe otro motivo, repetitivo y enfermizo, que representa una obsesión interminable que no lleva a nada. Sin embargo, tal y como sucede en la primera fantasía, la chica también logra sublimar esta obsesión fantasmagórica y escapar, victoriosa, de un pozo de oscuridad y desesperación.

Intermezzos (IV y V) -

Estos intermezzos son los que cierran esta colección de piezas. El primero lo compuse para la clase de composición, pero el resultado me gustó tanto que he decidido rescatarlo y considerarlo como una pieza seria. El segundo lo compuse durante el verano, lo cual, aunque no lo parezca, es algo bastante difícil en sí mismo. Ambos exhiben claramente la influencia que Brahms ha ejercido sobre mí.

MARCAS DE TIEMPO

00:00 Portada
00:18 I. Romanza
03:00 II. Fantasía
09:38 III. Fantasía
21:30 IV. Intermezzo
27:18 V. Intermezzo