En la historia de José, Dios no habla, ni se aparece, ni hace milagros, sin embargo, la mano de Dios está presente en todo momento:
• Dios es fuente de vida para todo ser humano amenazado por la miseria y la muerte
• Igual que a José, el dolor nos hace madurar, y a realizar un camino interior. En esos caminos, aunque escondido, está presente Dios
• “Dios escribe derecho con líneas torcidas”: Cuántas veces habremos dicho o escuchado esta expresión. Y es así, nuestras vidas se tuercen por el azar, fuerzas cósmicas, humanas… Pero Dios transforma esos caminos en sendas de futuro y salvación.

La historia de José tiene un final feliz, aporta esperanza ante situaciones semejantes. El ansia de poder, el odio, la envidia y los celos no triunfan siempre. José reconstruye su familia perdonando. La novela de José nos lleva a realizar una lectura positiva y esperanzada de situaciones generadas por el mal; asimismo nos habla de los valores y sentimientos que construyen vida.